Son muchas las consultas que se nos realiza sobre cuales son las mejores plantas aromáticas de otoño y la respuesta es muy sencilla: casi todas.
Hay dos épocas del año en las que las plantas aromáticas poseen las mejores condiciones para su cultivo. Esta son la primavera y el otoño. Dicho de otra manera… el calor del verano les suele perjudicar seriamente y el frío invernal hace que algunas de ellas invernen y por lo tanto no podamos disponer de sus cualidades culinarias en fresco.
Pero en caso de estas últimas, como son toda la familia de las Mentas (Mentha citrata orange, Mentha pulegium, Mentha piperina, Mentha suaveolens, Mentha arvensis, Mentha rotundifolia,…), recomendamos plantarlas también ahora ya que durante el invierno no están ‘paradas’ del todo. Siguen desarrollando sus rizomas y raíces por el suelo y con la llegada de la primavera brotan con muchísima más fuerza.
Otro tipo de aromáticas como el Romero, la Salvia o la Lavanda… realizan una esplendorosa brotación y floración durante el otoño y principios de invierno. Tras ella, recomendamos el realizar una buena poda y así conseguir una buena brotación primaveral.
La Estevia también nos brotará de nuevo con la llegada de las buenas temperaturas y en el caso de otras plantas como el Aloe vera o el Laurel pasarán el invierno sin problemas.
Por lo tanto, al plantearnos si vale la pena cultivar plantas aromáticas en otoño, debemos de saber que es una muy buena época. Ya no sólo porque vegetarán bien hasta final de año, sino porque lo harán mejor una vez bien arraigadas con el comienzo de la primavera.
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