¿Kaki, caqui, caki, kaqui?
Popularmente kaki, en Internet es el término que más búsquedas tiene, aunque la Real Academia Española de la Lengua te deriva a la acepción caqui:
1. m. Árbol de la familia de las Ebenáceas, originario del Japón y de China, del que se cultivan numerosas variedades en Europa y América del Sur. Su fruto, dulce y carnoso, del tamaño de una manzana aproximadamente, es comestible.
2. m. Fruto de este árbol.
Y aunque correctamente sea caqui, nosotros no rechazaremos la otra terminología de kaki por ser mucho más popular y nos referiremos a este frutal así.
El kaki es una planta cultivada ya desde el siglo VIII originaria de Asia, fue introducida en los países occidentales teniendo en cuenta su procedencia de manera reciente en dos vertientes: en EE.UU. a principios del siglo XIX y en Francia, España e Italia hacia 1870. Hoy la podemos ver en los huertos… profesionales o urbanos, patios e incluso en jardines, utilizada en este caso tanto como árbol ornamental como cultivada en toda la zona mediterránea por su fruto para consumo particular.
Podemos decir que el Kaki en Valencia está de moda, en especial en la comarca de La Ribera como cultivo alternativo al cítrico, tan extendido en la huerta valenciana.
Variedades de kaki
En nuestra sección de frutales, puede encontrar diferentes variedades de kaki. Son plantones de kaki cultivados en maceta para grandes plantaciones, e injertados en distintos pies para optar por los más resistentes en cada caso.
Las variedades se dividen en «astringentes» y «no astringentes». Las astringentes son las tradicionales y necesitan una correcta maduración para su consumo (Tomatero, Gordo, Rojo Brillante, Hachiya, Tanenashi, Kushillama etc.). Las variedades «no astringentes» son las de mayor consumo actualmente y entre éstas destacan las «tipo manzana» Sharon, Fuyu y Jiro.
Entre las variedades de kaki más demandadas y que tienen a su disposición en nuestro centro está el Rojo Brillante, cuyo fruto se puede comercializar en fresco o en duro, quitándole la astringencia y quedando con la turgencia de una manzana. Es el famoso ‘Persimon’ que encontramos en supermercados, nombre con el que se le denomina como ‘marca al fruto’.
También disponemos de la variedad de kaki Jiro, que tiene muy buen sabor y no es astringente por lo que se puede consumir duro como si se tratase de una manzana, recolectado directamente del árbol, sin tratar su fruto. Es muy apreciada en Valencia, tanto para grandes producciones como incluso árbol frutal ornamental. Esta variedad Jiro es conocida también como Fuji. Es un frutal de vigor medio con un porte semi abierto y una producción elevada. El kaki Jiro posee una recolección más tardía que el Rojo Brillante. Su fruto también es algo diferente: es más achatado y cuadrangular.
Menos conocida pero igual de buena es la variedad Sharon, de fruto más pequeño y tardío.
Están disponible en contenedores perfectamente enraizados para poder ser plantados en cualquier época del año. Para grandes producciones, Tot en U coordina la entrega de plantones, de tamaño y vigor homogéneo, para que su plantación sea todo un éxito.
Patrones de kaki
Para poder llevar a cabo el cultivo de este frutal se utilizan dos patrones, pies, franco o portainjertos:
- D. Lotus es el más extendido en España, bastante resistente al frío es tolerante a la sequía y suelos calizos, aunque la unión con la variedad no es totalmente perfecta, de forma que induce un aumento de la precocidad y una disminución del tamaño y de la longevidad
- D. Virginiana que le confieren cierta resistencia al frío y tolera los suelos encharcadizos y confiere un mayor porte.
Cuidados del kaki
El kaki, también conocido como palo santo, es una fruta tropical que pertenece a la familia de las Ebanáceas, especie Diospyros kaki. Próximo a D. Virginiana (kaki americano) y D. Lotus, que se cultivan como patrones.
Su porte es piramidal aunque con la edad tira a globoso. Los primeros años su crecimiento es lento. Su tronco es corto y su copa se extiende bastante. Puede llegar a alcanzar doce metros, aunque lo ideal es que se mantenga en seis más o menos.
Sus flores tienen un sistema reproductivo muy particular: dioico (flores masculinas y femeninas en distinto pie), monoico (flores masculinas y femeninas en el mismo pie) y hermafrodita (flores completas). Normalmente son monoicos, con flores masculinas en flores de tres y se desarrollan en la axila de las hojas. Las femeninas son bastante grandes, presentan pétalos verdosos y son solitarias y péndulas. Actualmente sólo se están poniendo pies femeninos. El cáliz permanece cuando el fruto está muy próximo a la madurez, es fundamental, fuente de citoquininas que intervienen en el mantenimiento del fruto, si se eliminara el fruto no cuajaría.
Sus hojas son pecioladas, caducas, es precioso ver esa tonalidad que pasa de rojo a naranja antes de recolectar el fruto, una baya con forma cuadrangular, cuya pulpa es muy astringente hasta que no está madura, en ese momento su sabor se vuelve delicioso.
Se trata de un árbol muy bien adaptado al clima mediterráneo. Exigente en luz, prefiere estar a pleno sol. Requiere de horas-frío (100), aunque la brotación es tardía debido a las necesidades de grados-día. Nuestros veranos largos y cálidos son ideales para la maduración de los frutos, por eso la hoja cae antes de que el fruto madure.
Protegerlo de los fuertes vientos, su sistema radicular no es muy profundo y procurarle un suelo fértil, con materia orgánica y muy buen drenaje, no soporta el exceso de humedad. Los marcos de plantación están en 3×5 en palmeta, 5×6 ó 6×6 en vaso o pirámide. Por su similitud con el melocotonero su formación puede ser en vaso. También por su porte piramidal esa formación es adecuada en su etapa juvenil. Y la formación en palmeta aumenta la producción pues permite mayor densidad de plantación al no ramificar mucho.
En cuanto al riego, al tener el sistema radicular superficial es preferible que sea localizado, su producción aumenta así, riegos frecuentes y ligeros si está en regadío, claro. Porque se puede también cultivar como planta de secano si se le dan riegos ligeros de apoyo en verano.
En el tema del abonado, demanda bastante materia orgánica, también potasio, fósforo, calcio y magnesio. El nitrógeno también en forma amoniacal y repartido en dos pases, aplicando 2/3 en primavera para el cuaje y 1/3 en verano durante el engorde del fruto. Si el suelo es calizo sufrirá de clorosis férrica, por lo que habrá que aportar quelatos de hierro.
Si aparecen malas hierbas o se eliminan manualmente en caso de ser un huerto urbano y si es un huerto de producción habrá que aplicar herbicida ya que sufre con el laboreo debido a la superficialidad de las raíces.
Las podas serán ligeras. Si hay carga de frutos se pueden apuntalar las ramas para evitar roturas. Y también se puede forzar un aclareo si no hay riesgo de heladas.
En cuanto a la recolección y disfrute del kaki, diremos que la presencia de taninos en la pulpa hace que sea astringente. Mediante su polimerización con etanol o acetaldehído desprendido por las semillas una vez que el fruto ha madurado, desaparece. También tras la recolección la astringencia la podemos eliminar mediante la exposición a vapores alcohólicos.
Plagas, enfermedades y fisiopatías del kaki
Aunque parece que puede ser complicado su control, todas tienen solución si le asesoran de cómo viven y como combatirlas.
Plagas del kaki
· Mosca de la fruta (Ceratitis Capitata)
· Sesia del caqui: (Synanthedon tipuliformis)
· Cochinilla alargada (Eulecanium persicae)
· Piojo de San José (Quadraspidiotus perniciosus)
· Chinche verde (Nezara viridula)
· Pájaros
· Cryptobables gnidiella
Enfermedades del kaki
· Antracnosis y los hongos
· Armillaria mellea
· Cephalosporium diospyri
· Podredumbre gris (Botrytis cinerea)
Fisiopatías del kaki
· Mancha morada: Se trata de una alteración fisiológica relacionada con la deficiencia de calcio, que afecta al fruto y hace difícil la comercialización.
Nuestro personal especializado estará encantado de asesorarle en todo lo que precise para disfrutar de este excelente frutal, el kaki.
