Salvia officinalis es su nombre científico, perteneciente a la familia de las Labiadas y originaria de la región mediterránea. También es conocida con varios nombres comunes: simplemente como salvia, salima fina, salvia real, hierba sagrada… entre otros.
La Salvia officinalis está clasificada como planta aromática y condimentaría, aunque como planta ornamental de temporada la podemos englobar dentro del grupo de plantas de primavera y principios de verano. Se puede comprar en los Centros de Jardinería tanto en sobres de semillas como planta ya terminada en maceta.
En el primer caso y tras realizar el semillero y tener las plantas ya germinadas, las plantaremos en macetas de unos 9 ó 10 cm. de diámetro, solamente cuando adquieran el tamaño adecuado las plantaremos directamente al jardín o en macetas mayores o jardineras.
Este arbusto aromático de tallos erguidos puede alcanzar hasta 60 cm de altura. Sus hojas son aterciopeladas por ambos lados, enteras, de un color verde grisáceas, elípticas y desprenden un fuerte aroma alcanforado.
Las flores están reunidas comúnmente en la parte terminal del tallo. El color al que más estamos acostumbrados y por el que se confunde con la Lavanda officinalis es el violeta, aunque actualmente y gracias a los genetistas podemos encontrar esta planta en distintas tonalidades de hoja y flor.
La Salvia officinalis resulta interesante en el jardín a lo largo de todo el año pero es en el mes de mayo cuando florece y se muestra realmente esplendorosa. En el jardín ornamental se utiliza en rocallas, para realizar borduras y para setos bajos. Y en maceta es muy elegante donde se ubique.
Cuidados de la Salvia officinalis
Debemos saber que en el sustrato el exceso de salinidad no le va bien, por lo tanto digamos que lo adecuado sería un pH de entre 6 y 6,5 y una Ec (conductibilidad eléctrica del sustrato) entre 1,5 y 2. Un sustrato de los llamados ‘universal’ o para plantas de exterior, será el ideal.
Antes de plantar la Salvia officinalis si no lo hacemos con los sustratos antes nombrados, debemos añadir un abonado de fondo a la tierra. Al mes de su plantación sería razonable iniciar el abonado con un equilibrio 18-12-24 más microlelementos, ya que los abonos muy ricos en nitrógeno reducen la cantidad y calidad de las flores.
La temperatura ideal estaría durante la noche entre 8 a 10ºC y durante el día de 22 a 26ºC, en una exposición a pleno sol. En el caso de que las queramos lucir en el interior, deben estar expuestas con la mayor luz posible porque de los contrario no florecerán.
Plagas y enfermedades de la Salvia officinalis
En cuanto a las enfermedades no son muy frecuentes, pero en el caso de riesgo serían, la Alternaria, Mildiu, Corynespora y Roya los más propensos a manifestarse.
Las plagas más comunes que se pueden presentar serían el thrips, araña roja, pulgón, la mosca blanca y el minador.
Nada que en nuestro Centro de Jardinería Tot en Ú en Valencia no podamos combatir, pregunte a nuestro personal especializado.
